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  • Proverbios 4:11 Por el camino de la sabiduría te he encaminado, Y por veredas derechas te he hecho andar...
  • Proverbio 4:12 Cuando anduvieres, no se estrecharán tus pasos, Y si corrieres, no tropezarás.
  • Proverbios 4:13 Retén el consejo, no lo dejes; Guárdalo, porque eso es tu vida...
  • Proverbios 4:14 No entres por la vereda de los impíos, Ni vayas por el camino de los malos....
  • El Leon de la Tribu de Juda (Apocalipsis 5.5)

    Y uno de los ancianos me dijo: No llores. He aquí que el León de la tribu de Judá, la raíz de David, ha vencido para abrir el libro y desatar sus siete sellos

  • La Cosecha esta Lista (Juan 4.35)

    ¿No decís vosotros: Aún faltan cuatro meses para que llegue la siega? He aquí os digo: Alzad vuestros ojos y mirad los campos, porque ya están blancos para la siega. Y el que siega recibe salario, y recoge fruto para vida eterna, para que el que siembra goce juntamente con el que siega. Porque en esto es verdadero el dicho: Uno es el que siembra, y otro es el que siega. Yo os he enviado a segar lo que vosotros no labrasteis; otros labraron, y vosotros habéis entrado en sus labores.

  • Parabola del Sembrador (Mateo 13)

    He aquí, el sembrador salió a sembrar. 13:4 Y mientras sembraba, parte de la semilla cayó junto al camino; y vinieron las aves y la comieron Parte cayó en pedregales, donde no había mucha tierra; y brotó pronto, porque no tenía profundidad de tierra; pero salido el sol, se quemó; y porque no tenía raíz, se secó.Y parte cayó entre espinos; y los espinos crecieron, y la ahogaron.Pero parte cayó en buena tierra, y dio fruto, cuál a ciento, cuál a sesenta, y cuál a treinta por uno. El que tiene oídos para oír, oiga.

  • Por sus Frutos los Conocereis (Lucas 6.43)

    No es buen árbol el que da malos frutos, ni árbol malo el que da buen fruto. Porque cada árbol se conoce por su fruto; pues no se cosechan higos de los espinos, ni de las zarzas se vendimian uvas. El hombre bueno, del buen tesoro de su corazón saca lo bueno; y el hombre malo, del mal tesoro de su corazón saca lo malo; porque de la abundancia del corazón habla la boca.

Vestidura del Siglo La última Moda

lunes, 4 de julio de 2011


1. Un vestido bordado a mano hecho de tela de Santidad (2 Corintios 7-1)

2. Con tiras de diversos colores hechos de Sabiduría (Job 28-28)

3. Calzado de los pies, con preparación del Evangelio (Efesios 6-15)

4. Sandalias de diversas tiras de Fe

5. Preferiblemente una cola alta para el cabello con gomas de Perseverancia

6. Y por ultimo un suave maquillaje, con base de esperanza, colores de unidad y un poco de amor.

Lo último en moda para la mujer de Cristo. ¡Si, tu!
Pruébala ya.

Un pasado en el presente


Cuando vivimos constantemente recordando lo que nos sucedió en el pasado, estamos incluyéndolo injustamente en nuestro presente.

Habremos vivido las mejores o peores experiencias de la vida y aun así, hacemos que se queden grabadas en nuestro disco cerebral.

Hay algunas cosas que se deben olvidar y otras que son buenas tenerlas presentes, pero un continuo inventario de todo lo malo que nos sucedió solo nos hará sufrir.

La vida nunca es lo suficientemente mala como para hacernos sufrir de tal manera que no podamos olvidar los diminutos errores en el pasado.

Olvidar es una de las mejores opciones ante las más horribles decisiones a tomar.
Dios ha tenido, tiene y siempre tendra el control de nuestra vida en sus manos. El sabe por qué nos pasa cada cosa y nunca será para mal.

Las heridas mas difíciles de borrar son las que no se ven, las del interior. ¿Pero para Dios hay algo imposible? El puede hacer que esas heridas sean curadas a tal punto que ni siquiera recuerdes que estaban ahí.

Nuestro presente importa mucho, no lo vivamos invadiendo con nuestro pasado.
Lo que paso, quedo en el ayer. Vive el hoy, que poco a poco se convertirá en tu recuerdo.
Solo depende de ti hacerlo digno de recordar.

Salgamos YA del escondite


Muchos de nosotros nos hemos pasado la vida ocultándonos, avergonzándonos de lo que somos interiormente.

Podemos escondernos mediante una doble vida, con drogas u otros vicios y adicciones, para hacernos sentir como si fuéramos otra persona o ponernos por encima de los demás como si fuéramos los mejores.

Uno de los pasos del crecimiento espiritual es saber sacar a la luz las cosas que hemos ocultado aun de nosotros mismos.

Después de desobedecer, Adán y Eva ‘’conocieron que estaban desnudos: entonces cosieron hojas de higuera, y se hicieron delantales…… Mas Jehová Dios llamo al hombre, y le dijo: ¿Donde estas tu? Y él respondió: Oí tu voz en el huerto, y tuve miedo, porque estaba desnudo; y me escondí’’ (Génesis 3. 7-10). Desde entonces el hombre ha vivido ocultando y ocultándose.

Jesús continuamente confrontaba los líderes religiosos con la hipocresía que manifestaban. La palabra hipócrita describe a la persona que finge virtudes o cualidades que realmente no posee. Una vez Jesús le dijo a esos líderes: ‘’ ¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! Porque limpiáis lo de fuera del vaso y del plato; pero por dentro estáis llenos de robo y de injusticia…..Limpia primero lo de dentro del vaso y del plato, para que también lo de fuera sea limpio’’ (Mateo 23. 25-26)

Cuando la verdadera persona que somos, salga de su escondite, tendremos que lidiar con la suciedad. Hacer este inventario es una buena forma de ‘’limpiar lo de dentro’’. Parte del lavamiento puede incluir un baño de lágrimas. Solamente poniendo al descubierto lo oculto de nosotros mismos podremos cambiar nuestra persona exterior, incluidas nuestras malas conductas.

Percepción de uno mismo


Desarrollamos nuestro sentido de percepción personal al percatarnos de cómo nos ven las personas que son importantes en nuestra vida. Si crecimos en una familia disfuncional, la distorsionada imagen que se formaron de nosotros probablemente deformo nuestra habilidad de vernos tal y como verdaderamente somos a los ojos de Dios. Entender como Dios nos ve y que nos ha valorado, puede ayudarnos a superar la percepción negativa y marginada de la realidad en la que Dios nos tiene incluidos, que en el pasado pudimos haber desarrollado.

El rey David se maravillo al pensar en lo mucho que Dios lo valoraba: ‘’ Le has hecho poco menor que los ángeles y lo coronaste de gloria y de honra. Le hiciste gobernar sobre las obras de tus manos; todo lo pusiste debajo de sus pies’’ (Salmo 8. 4-7)
‘’ ¡Cuan preciosos son, oh Dios, tus pensamientos! ¡Cuan grande es la suma de ellos! Si los enumero, se multiplican más que la arena” despierto, y aun estoy contigo’’ (Salmo 139.17-18)

Dios demostró lo mucho que valemos para El al enviar a Jesús para entregar su vida por nosotros.

Dios quiere que nos demos cuenta de cuan valiosos somos para él y que nos veamos a nosotros mismos como la luz de su amor. Piensa en esto: Si Dios nos considero dignos de que El renunciara a su don mas preciado (su único hijo) ¿que nos dices esto sobre el valor que tenemos para él?

Valórate y recuerda siempre tener una buena percepción de ti. Tu eres importante.

Luz Vs. Tinieblas


La ausencia de luz es una experiencia deprimente. Cuando en una ciudad se produce un corte de la energía eléctrica por la noche, acontecen muchas situaciones de difícil solución. Probablemente lo que más se sufra por causa de su ausencia es por el manto opaco y triste que se abate sobre calles y casas que quedan inmersos en un caos oscuro de incertidumbre, temor, peligro y desorientación.

Las consecuencias de esa falta son muchas; por fortuna hay generadores que permiten iluminación provisoria de emergencia, especialmente en lugares públicos.

En la Biblia las tinieblas son utilizadas como símbolo del mal y de sus efectos en vida de la humanidad. Cuando Jesús quiso pintar la situación de los que no podrán experimentar la presencia de Dios en la eternidad, la llama ‘’las tinieblas de afuera’’.

Pero, gracias a Dios, hay esperanza: se llama Jesucristo. ‘’En el estaba la vida, y la vida era la luz de los hombres…..La luz verdadera que alumbra a todo hombre que venía a este mundo’’.

Más adelante en el Evangelio, se complementaria esta excepcional declaración con otra, no menos extraordinaria. ‘’ Yo soy la luz del mundo; el que me sigue no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la vida’’ contrarrestándose así los efectos negativos de estas.
Este ofrecimiento final, como se ve, requiere de una decisión personal: seguirle. Quien la asume, puede decir:

‘’ Gracias, nuestro Dios, por la luz que tu Hijo nos da en la cruz’’

Gozo en la Presencia de Dios


La mayoría de nosotros necesita algo antes de buscarlo de todo corazón. Hasta que nos damos cuenta de lo mucho que Dios nos ama y se preocupa por nosotros probablemente no tengamos el deseo de orar. Hasta que creamos sinceramente en que el nos ha perdonado por completo, sentiremos vergüenza de mirarle.

Si nos aferramos a nuestros conceptos equivocados de Dios, este paso resultara ser una gran carga en vez de producirnos gozo.

La vida del Rey David debería darnos esperanza. Después de enfrentar cara a cara su pecaminosidad fue capaz de cantar: ‘’Tuya es la alabanza en Sion, oh Dios, a ti se pagaran los votos. Tú oyes la oración; a ti vendrá toda carne. Las iniquidades prevalecen contra mí; mas nuestras rebeliones tú las perdonaras. Bienaventurado el que tu escogieres y atrajeres a ti, para que habite en tus atrios; seremos saciados del bien de tu casa, de tu santo templo’’ (Salmo 65. 1-4)

Dios quiere que seamos como los que Vivian y servían en su templo, y que vayamos libremente a su presencia. El quiere que sepamos que somos bienvenidos y valorados ante El. Como lo relata Mateo 10. 29-31.

El Señor esta siempre con nosotros y puede ser en este mismo momento, fuente de gozo y felicidad. Podemos anhelar cada día pasar tiempo con él y vivir en su bella presencia.

Fe


Si no tenemos fe en la promesa de un futuro mejor para nosotros, de la mejoría de nuestra familia o del, tal vez, buen resultado ante una decisión tomada, no debiéramos emprender el duro camino y los dolores comprendidos en el crecimiento espiritual. Pero a medida que pasa el tiempo, podemos desalentarnos gradualmente por lo largo del proceso.

Nuestros espíritus pueden enfriarse por los altibajos del camino, y sentimos que nuestra fe retrocede en vez de fluir.

Algunas personas dicen haberse librado instantáneamente de sus vicios o problemas, pero la mayoría necesitaremos fe y paciencia para heredar la promesa de una nueva vida, de un nuevo comienzo o de un crecimiento.

El autor de hebreos escribe: ‘’ A fin de que no os hagáis perezosos, sino imitadores de aquellos que por la fe y la paciencia heredan promesas’’
Porque cuando Dios hizo la promesa a Abraham… Juro por sí mismo, diciendo: De cierto te bendeciré con abundancia y te multiplicare grandemente. Y habiendo esperado con paciencia, alcanzo la promesa’’ (Hebreos 6.12-15)

El punto clave aquí es que Abraham espero veinticinco años para ver cumplida esa promesa.
Mientras esperaba, hubo ocasiones cuando se mostro impaciente. En cierto momento las cosas en sus propias manos al tener un hijo de una segunda mujer. Quizá a veces se cuestiono si de veras había recibido tal promesa.

Aun se reía con incredulidad cuando se le dijo que la promesa estaba próxima a cumplirse. Pero por fin la recibió y al final de su vida ‘’Jehová había bendecido a Abraham en todo’’ (Génesis 24.1)

¡Sigamos adelante con paciencia! El hecho de que generalmente el crecimiento espiritual requiere de tiempo, no significa que nuestra fe sea en vano.

Dando gloria a quien gloria merece


En nuestro día a día, logramos alcanzar diminutas pero importantes metas que no son posibles realizaras sin la dirección de Dios.

Resulta que somos tan ignorantes al respecto, que no nos detenemos por un momento a pensar en las cosas grandes que Dios hizo, hace y hará en nuestra vida.

Le pedimos de todo corazón, que nos ayude en una presentación musical, que se arregle la cámara que descompusimos o que nos dé una mano para conquistar a esa persona que tanto nos importa. En estas situaciones, nosotros también aportamos. Pero al final, si logramos conseguirlo, siempre nos felicitamos a nosotros mismos por lo ‘’buenos’’ que somos y lo ‘’capacitados’’ que hemos nacido. De alguna u otra manera, estamos olvidando que nada sería posible si Dios así no lo quisiera. Que todo lo que es, ha sido y será es gracias a Dios. Que no somos capaces de nada si Dios no está ahí.

La palabra de Dios dice en el Salmo 8. 3-4: ‘’Cuando veo tus cielos, obra de tus dedos, la luna y las estrellas que tú formaste.
Digo: ¿Que es el hombre, para que tengas de él memoria, y el hijo del hombre para que lo visites?’’

No somos nada sin Dios. Si logramos hacer algo es porque sencillamente Dios se ha manifestado en cada uno de los ámbitos y aspectos de ese acontecimiento tan importante para nosotros.

Dios nos ama y solo quiere darnos lo mejor pero tenemos que recordar que El, como padre celestial, merece honra, gloria y honor por nuestros logros y triunfos.
No hay nada mejor para un padre que el poder sentirse orgulloso de su hijo y ¿cómo podemos enorgullecer a Dios? Creyendo en El, confiando en El, obedeciéndole y acertando que sin El no existe nada.

Le damos honra a todo menos al Creador del universo.
Aprende a darle la Gloria a Dios, porque el verdaderamente la merece.

Cumpliendo las promesas


¿Cuánta gente vive todavía bajo la sombra de nuestras promesas incumplidas? ¿Es demasiado tarde para regresar ahora y tratar de arreglarlo todo?

Pues el rey David le hizo una promesa a su amigo Jonatán. Dijo David: ‘’ ¿Ha quedado alguno de la casa de Saúl a quien haga yo misericordia por amor de Jonatán?’’ (2 Samuel 9.1)
El único hijo de Jonatán que quedaba, Mefi-boset, había vivido mucho tiempo con el dolor de la promesa incumplida de David. Había configurado su estilo de vida, su estado emocional y el concepto que tenia de si mismo. Su abuelo, el Rey Saúl, había maltratado a David antes de que este se convirtiera en rey. Quizá Mefi-boset temía que David lo maltratara a causa de su abuelo. Quizá había comenzado a sufrir la culpa de los pecados de Saúl. El temor y la culpa habían recaído sobre Mefi-boset hasta que David recordó y cumplió su promesa.

Probablemente hemos afectado a personas que conocemos con promesas que no hemos cumplido. Es importante que tratemos de cumplir cualquier promesa que hayamos hecho. No importa si en el momento actual, lo creemos demasiado difícil. Hacemos las promesas porque nos creemos capaces de cumplirlas. Y cuando no podemos, lo menos que podemos hacer es preguntar que ha representado nuestro descuido para aquellos a quienes hemos defraudado y pedir perdón por no cumplir esa promesa que una vez hicimos.

Amigos de la Luz


A veces no queremos conocer la voluntad de Dios porque hay aspectos de nuestra vida con los que no estamos listos para lidiar todavía.

El crecimiento espiritual es un proceso duro para nosotros. Tal vez estemos preparados para orar, pidiendo la voluntad de Dios en algunos asuntos, pero nos incomoda que la luz de Dios brille sobre otros que todavía se refugian en la vergüenza.

Cuando el hablo con aquellos que se negaban a confiarle sus vidas, Jesús les dijo ‘’ La luz vino al mundo, los hombres amaron mas las tinieblas que la luz, para que sus obras no sean reprendidas’’ (Juan 3.19-20). Más adelante, en uno de sus discursos, le dijo a la gente: ‘’Yo soy la luz del mundo; sino que tendrá la luz de la vida’’ (Juan 8.12)

La oscuridad es muy buena cuando estamos tratando de esconder algo, pero se necesita la luz cuando lo que queremos es caminar sin caernos.

Cuando tratábamos de esconder nuestra conducta vergonzosa o nos aferrábamos a nuestra adicción, la oscuridad parecía ser nuestra amiga. Pero ahora que estamos tratando de caminar hacia el crecimiento espiritual, necesitamos la luz para no tropezar. Ya no tenemos que temerle a la luz de Dios porque tenemos su perdón a través de Cristo. El quiere guiarnos con seguridad por el camino correcto.

No podemos entrar a la luz si no estamos dispuestos a salir de la oscuridad. Esta en nosotros la iniciativa de poder ser amigos de la luz?